Líneas directas de Nishmoseini

«Muchas gracias a las madres nishmoseini que nos dejaron deliciosas galletas calientes a las 4 de la mañana antes de que nos dirigiéramos a CHOP».


«La sala de café es mamash un salvavidas. estaba en el hospital y me pedían que me hicieran un procedimiento determinado. Estaba tan perdida. Llamé a la cafetería e hice mi pregunta. Unos minutos más tarde obtuve la respuesta».

«Los amigos que hice en la cafetería me ayudan a seguir adelante».

«En este momento, no tengo tiempo para llamar a la línea directa con tanta frecuencia, pero sé que si necesito algo, hay todo un grupo de mujeres que me ayudarán sin pensarlo dos veces».

«Mi esposo habló con personas en nuestra situación por primera vez, a través de la cafetería».

«Mi segundo hijo acaba de recibir el diagnóstico y mi esposa es adicta a la línea. Es un salvavidas para ella, hizo amigos y ahora es una persona nueva».

«Cuando esperábamos a nuestro bebé con necesidades especiales, no queríamos decírselo a nadie, pero la línea directa se convirtió en nuestro salvavidas».

«¡Pude evitar que un niño quedara ciego solo con la información que recibí de la línea directa!»